Wednesday, February 23, 2005

¿Qué pensará Dios de mí?

¿Que pensará Dios de mí? Una interrogante más que trascendente

Cuenta la historia que Santa Teresa de Lisieux se preguntaba frecuentemente ¿Qué pensará Dios de mí? La interrogante seguramente incomprendida para muchos, invitó a la santa y nos invita a todos a reflexionar con tiempo y espacio sobre lo que hasta el momento hacemos o dejamos de hacer por Dios.

No cabe duda que el ruido del mundo y los innumerables deberes y compromisos que nos trazamos casi por obligación, muchas veces sin mayor análisis de sus consecuencias dejan poco o ningún espacio para amar y remontarnos al infinito, al supremo, a Dios.

Es ahí donde la pregunta de la santa nos obliga a la más atenta reflexión, que nos conduce a cuestionarnos a nosotros mismos si hacemos lo que tenemos que hacer para ser verdaderamente felices o atendemos únicamente lo intrascendente, lo que pasa, lo que nos aleja del plan de amor de Dios.
Reflexionar sobre lo que el Señor espera de nosotros es importantísimo para dar un giro, para cambiar, para reconciliarnos, para ser auténticamente felices .

Más allá de sentir culpa, recordemos como decía Jesús “Quién este libre de pecado que tire la primera piedra, se trata de darnos una oportunidad para ser verdaderamente felices, y la única manera es haciendo un alto en la vida para con la gracia de Dios caminar hacia la luz que es Cristo.
Hacernos la interrogante de Santa Teresa de Lisieux no es condenarnos, al contrario es recomenzar, prendiendo la luz en medio de la oscuridad, reconociéndonos criaturas, dependientes de Dios siempre.Es importante tomar en cuenta esto último porque la soberbia puede y efectivamente consigue muchas veces cegarnos introduciendo en nuestra mente la idea de que podemos hacer solos nuestra vida, sin el aporte del creador.
Cuaresma es tiempo de reflexión y de conversión, muy oportuno para hacernos la pregunta que hemos explicado. La santa amó a Cristo con todo su ser, viviendo pendiente de los designios de Dios siempre. Si ella se cuestionó sobre sus obligaciones con Dios porque nosotros no lo haríamos.

Tuesday, February 22, 2005

Gobierno y Oposición practicaron malas artes

Falsificación de firmas en grandes lotes
No sólo hay que ver la paja en el Oficialismo sino la viga en la Oposición

Tras las investigaciones de la presunta fabrica de firmas del partido de Gobierno, sale a la luz evidentes pruebas de que en la oposición también se habrían practicado las mismas artes

Desde que el congresista Rafael Rey denunció que Perú Posible (PP) habría falsificado firmas, misteriosamente toda la clase política le puso los ojos a los chakanistas. No obstante en los predios periodisticos era vox populi que los partidos de oposición también habrían copiado rúbricas. La interrogante evidente es sin duda ¿Por qué razones sólo se miró a PP, acaso necesidad de tambalear la gobernabilidad?

Pero entonces si las cosas son tan evidentes ¿Por qué se pusieron todos los reflectores sobre PP? Las condenas por falsificar firmas no solamente prescriben a los pocos años, sino que no obtienen mayores penas, por tanto la persecusión del délito en sí, casi está descartado. Más bien se advierte una intención moralista, ¿acaso algún argumento para la vacancia presidencia? o más bien "sustentos" para invalidar la elección popular del 2001 que puso fin a un sistema autocratico. Creo que por ahí van las cosas.

Más allá de perseguir a un cabecilla falsificador, lo que se busca con primeras planas y comisiones investigadoras es sin duda la caída del presidente y con ello "aunque algunos lo minimizen", del sistema democrático.
Es muy probable que Perú Posible haya falsificado firmas, y es legitimo y honesto perseguir el delito. No obstante en la actualidad vemos más bien una persecusión a capa y espada de determinados personajes. Si verdaderamente se quiere perseguir el delito, entonces esperaremos que los diferentes medios de comunicación y políticos pongan sus ojos tambié en el partido Code - Renovación.
La pregunta que todos nos debemos hacer es cual es el fin de todo esto, al responderla recien podremos decir si verdaderamente vale la pena tanto barullo.

Alan García no convence

Nadie le Cree
Alan García no convence en día de la fraternidad mostrándose muy similar a los años en que fue gobernante

A pesar de que sus militantes esperaban con expectativa su mensaje por el día de la Fraternidad, el lider aprista Alan García lució desmemoriado al no recordar el desastre de su gobierno y mostrarse ilusamente como el único salvador del país. ¿Donde estuvo su autocritica como ex presidente y actual lider de la oposición? Nadie le cree

Escuchar a Alan García declinar su candidatura para cederle paso a alguien que aglutine y lidere el llamado Frente Social no es más que una estrategia electorera que sólo pretende ganar tiempo en el electorado y de paso distraer a sus contrincantes que han lapidado su discurso por demagogo.

Para nadie es secreto que para el líder aprista ponerse la banda presidencial es una aspiración que no lo ha dejado dormir desde la elección del 2001 que casi gana con los votos contrarios a Toledo. Lo que parece no vislumbrar el ex presidente es sin duda que los tiempos actuales no son los mismos y que el desgaste de su actuar opositor o la actuación de sus correligionarios en los gobiernos regionales si que consecuencias nefastas le traen

Alan García hastió a la opinión pública, por eso no creemos que suba como la espuma en la próxima campaña electoral. La única manera de subir en las preferencias es liderar por lo bajo una alianza con otro candidato, porque todo lo que en campaña tenga nombre García será desechado por el votante

La razón de estos desplantes del electorado está sin duda en el gran anti que tiene García por su desastroso gobierno (1985-1990), su demagogica actuación como líder opositor, la estupidez del puntillazo al ciudadano Jesús Lora – una patada al pueblo - y la indisciplina creciente en su partido.

Sería inteligente García si no solo proclama de la boca para afuera la renuncia a su candidatura. Hacerlo de manera efctiva puede ser más rentable para el futuro del aprismo.
Lo claro que es que nadie le cree y ese es su principal problema, porque a quién no se le cree poco o nada se le considera.